Antonio de mi alma
¿por qué tanta pena?
por ver tu cara contenta yo doy
la sangre de mis venas
cuando yo me muera
que no me vean muerto
para que mis niños recuerden mis ojos
alegres y abiertos
compadrito mío Cuco
dígale usted a mi padre
como me quedo en esta casitapuerta
revolcadito en mi propia sangre