Ay, al escucharlo, temblé
por tu causa habiá temblaíto al escucharlo
cuando lo escuché, temblé
a mí mhan leío el sino
mhan leío el Libro del sino
a mí me han leído el sino
y al escucharlo, temblé
por tu causa habiá temblaíto
cuando lo escuché, temblé
¡qué cosa no me diría
que aborrecía tu querer!
que aborrecía tu querer
tanto como te quería
La mujeres que mal proceden
las mujeres que no quieren a nadie
pasan la vía en contento
ay, le dan los gustitos que quieren
hasta que les llega el tiempo
y ni aún los perros las quieren
hartas de pasar tormentos