diez céntimos le di a un ciego
y me bendijo a mi madre
qué limosna tan chiquita
para recompensa tan grande
me gusta verte llorar
tus lagrimitas me parecían
caracolitos del mar
por hacerme tan malas cosas
y por darme tú a mí tantos tormentos
mira a lo que has dado lugar
a que yo tenga muy malina lengua
en contra de mi voluntad
vente conmigo a mi casa
que yo le diré a mi madre
que eres la Virgen de Gracia
dicen los doctores
que me encuentran grave
muy malo de muerte
yo bien se que muero
que me llamen a mí a otro doctor
que me arrancan de mi cuerpo
las alas del corazón