la alegría en mí paró
en mí no reinaba la alegría
muerto tengo mi corazón
no tengas pena, maldita
que la mancha de la mora
con otra verde se quitan
como padre peregrino
de penitencia andaré
hasta encontrar el asesino
que me robó tu querer
a que me pones por maña
piedras por los caminitos
pa que yo tropiece y caiga
vengas vestida de nazareno
y así pegues las tres caídas
en tu palabrita no creo
que me tienes consumido
como las salamanquesas
por los rincones metido
la alegría en mí paró
en mí no reina alegría
muerto tengo mi corazón
amparo
por Dios no llamarme amparo
como el enfermo buscaba el alivio
yo lo busco y no lo hallo
a la revolvé
las entrañitas de tu cuerpo se te arranquen
y no te vuelva a querer
yo no tengo máquina
porque la he vendido
y con los dineros
me compro un vestido