compañera de mi alma
dime donde estás metida
a voces yo te llamaba
y tú no me respondías
me dicen que el querer
era cosita, prima mía, de juguete
pero veo que se pasan
las fatigas de la muerte
yo fui al campo a divertirme
dejadme flores, dejadme
que aquel que tiene una pena
no se la divierte nadie
preguntaselo a tu madre
si ella te dice que no
mi palabra es la que vale
acuerdate cuando entonces
bajabas descalcita a abrirme
y ahora no me conoces
vente conmigo
a la retama
de los olivos
te voy a querer
aunque no tenga
pan que comer