tú puesto en esa esquina
con una miradita tuya
los huesecitos me los lastimas
qué pena es quererte tanto
y no tenerte a mi vera
primo de mi alma
esto si que son quebrantos
de ti aguardo el perdón
y si tú no me lo mandas
castigo te mande Dios
ay, que te quiero
pero de lachi
no te lo peno