Martinetes del presidio

Viejo cante jondo. El Agujetas

no soy ya aquél quien era
ni quién debía yo de ser
soy un mueble de tristeza
arrumbadito por la pared

estando yo preso en Cádiz
que yo me sentaba en el mío petate
me ponía a cavilar
y no siento lo que yo había pasao
sino lo que me quedaba a mí que pasar