Fandangos

Rubichis. Diego y Domingo de los Santos

tus labios sobre los míos
¿por qué, mujer, tú me ponías?
¿qué veneno me dejaste
que me tienes consumido?
y por otro tú a mí me dejaste

cuando me ves, mujer, por la calle
y hombro con hombro se rozan
tú echas la vista al suelo
y tú te pones orgullosa
porque sabes, mujer, que te quiero

a una flor de una marisma
¿por qué yo le había preguntadito por ti?
yo le dije si me amabas
y me dijo de que sí
la picarita a mí me engañaba

mamaíta, ponte tú el mantoncito
anda ve tú a la audiencia
corre y habla con el fiscal
a ver si con tu experiencia, mamaíta de mi alma
me sacas a mí en libertad