Milonga

Rito y Geografía del Cante. Cantes flamencos importados

por las trenzas de tu pelo
un canario se subía
y se paraba en tu frente
y en tu boquita bebía
creyendo que era una fuente

yo me asomé a tu ventana
por ver lo que estabas haciendo
y vi que estabas llorando
la culpa yo no la tengo
de lo que te está pasando

quisiera ser colorete
para adornarte la carita
y darte besos en los labios
y morderte la boquita
eres más guapa que nadie
el sentido a mí me lo quitas

no se muere nadie, no
porque quiera con delirio
cuando no me he muerto yo
pasando tanto martirio
como un querer me costó

y en una cierta reunión
se dio una comida un día
y allí se partió un melón
única fruta que había
yo partí de mi sandía
y le brindé a una casada
me dijo desconsolada:
muchas gracias, caballero
que luto tengo y no puedo
comer fruta colorada