de terciopelo era el vestido
para el Niño de San Antonio
como lo lleva en sus brazos
se lo tengo ofrecido
y a ti te tiene que faltar
por lo mala que eres
compañera de mi alma
la salud y la libertad
que contigo yo no igualo
eso será en el dinero
porque en el querer te gano
que yo no soy de madera
los bocaditos de mi cuerpo
tú me los estabas quitando
como si no me doliera