mis penitas no eran ná
siquiera por un momento
que se ponga en mi lugar
a la revolvé
el cigarrito se te apague
y no lo puedas encender
si te publico me pierdo
si me callo, yo no se
no me queda más remedio
que encomendarme a Undebé
qué grandes son mis fatigas
no encuentro quien me las compre
y el venderlas a mí me obliga
que me quieres, que me adoras
cuando vuelves las espaldas
de cualquiera te enamoras
yo me voy pa Utrera
me voy con mi niña Inés
la mejor de España entera